Es hora que reconozcas el lado bueno de serlo
En ocasiones las percepciones y adjetivos pueden jugar en contra de una misma y también de los demás. El ser terca es una de esas etiquetas que tal vez no sea tan negativa como se suele creer.
(Lee también: El límite del compromiso, donde los dos miembros no siempre coinciden)
Asimismo se asocia a estas personas el egocentrismo, el mal temperamento y la competitividad. Pareciera no querer dar su brazo a torcer en la vida. Pero aun así pudiéramos preguntarnos si eso no sería una ventaja en ciertas ocasiones.
Ser terca. Aprovechate de sus ventajas
- Toma decisiones más rápidas. Este puede ser un proceso difícil para mujeres y hombres pasivos. Pero si eres terca eres más rápida al decidir. Además, te cuesta poco porque sabes lo que te gusta y lo que no. Lo que debes tratar es de no ser tan enfática con quienes te rodean porque podrías intimidarlos.
- No desestimas ningún objetivo. El ser perseverante es la cualidad que más te distingue. Al ser terca no desestimas ningún objetivo que te propongas por muy difícil o lejano que se vea. El hecho que no te rindas ya sea haciendo una dieta o creando un negocio, es muy favorable. Eso es lo que te separa de la mayoría.
- Pocos influenciables. Se dicen que los tercos tienen mentes estrechas y que no están dispuestos a ceder en nada. Pero estos si escuchan y analizan diferentes perspectivas, solo que al final terminan guiándose por sus propias reglas. Tan vez quedemos cortos al decir que son pocos influenciables.
- Confías en ti misma. Todos deseamos hacer realidad nuestros planes y anhelos pero si eres terca confiaras ante todo en ti misma. Tu intuición te puede facilitar las cosas, con esto estarás construyendo un camino menos convencional, aunque parezcas egoístas.
- Algo rebelde. Lo positivo de ser terca es que interiormente eres algo rebelde ya que andas a tu propio ritmo. Claro que te exiges cada día mas, eres perfeccionista y hasta puedes ser algo controladora. Si esto no representa una carga para ti tampoco debería serlo para las demás personas.
(Lee también: Consentir demasiado a los hijos influye negativamente en su desarrollo)