La salud es una prioridad indiscutible en la sociedad. Por ello, la ciudadanía española busca cada vez más nuevas alternativas para tener acceso a una atención médica de forma rápida y de calidad en un momento en el que la Sanidad Pública está por encima de sus posibilidades. Con listas de espera que superan el año de espera en especialidades como Traumatología, son muchos los españoles que llevan optando desde hace años por los seguros privados médicos.
En concreto, según datos de la Unión Española de Entidades Aseguradoras y Reaseguradoras (UNESPA), los seguros de salud dan cobertura a uno de cada cuatro ciudadanos en nuestro país. En el pasado año, casi un 23% de la ciudadanía española contaba con un seguro de salud privado, lo que refleja el crecimiento en este sector.
Los motivos que están impulsando la contratación de estos seguros, que puede hacerse con la ayuda de comparadores como el de https://www.arpem.com/seguros-salud/, van desde el deseo de evitar las largas listas de espera del sistema público hasta la búsqueda de un trato más personalizado, pasando por la necesidad de mayor flexibilidad horaria para las consultas médicas.
Además, muchas pólizas de salud privadas incluyen servicios adicionales como asistencia en el extranjero, servicios de psicología, fisioterapia o salud dental, lo que las hace aún más atractivas para los consumidores.
Pero, ¿son todos los seguros de salud iguales? ¿Incluyen todas las especialidades? ¿De qué depende el precio de los mismos? Para responder a estas preguntas y a la hora de elegir un seguro de salud, es importante entender las diferencias entre las opciones con y sin copago.
¿Qué es un seguro de salud con copago?
Un seguro de salud con copago es aquel en el que el asegurado, además de pagar una prima mensual, debe abonar una cantidad adicional cada vez que utiliza un determinado servicio médico. Este importe, que suele ser una cantidad fija y relativamente pequeña, se paga por cada consulta, prueba diagnóstica o tratamiento que se realice.
El funcionamiento es sencillo: cuando el asegurado acude al médico o se somete a una prueba, debe pagar una cantidad establecida. La principal ventaja de este tipo de seguro es que la prima mensual suele ser más económica que en los seguros sin copago. Sin embargo, la desventaja es que los gastos pueden acumularse rápidamente si se necesita atención médica frecuente. Por tanto, para una persona que acude al médico regularmente o que padece una enfermedad crónica, estos costes adicionales pueden suponer un desembolso considerable a lo largo del año y podría ser recomendable la otra opción de seguro sin copago.
¿Qué es un seguro de salud sin copago?
Esta opción es aquella en la que el asegurado paga una prima mensual fija y no tiene que abonar cantidades adicionales por el uso de los servicios médicos. Una vez pagada la cuota mensual, el asegurado puede utilizar los servicios incluidos en su póliza sin coste adicional, independientemente de la frecuencia de uso.
La principal ventaja de este tipo de seguro es la tranquilidad que ofrece, ya que el asegurado sabe cuánto va a pagar cada mes y no tiene que preocuparse por gastos adicionales inesperados. Debido a ello, este suele ser el tipo de seguro de salud privado más habitual entre las personas que tienen problemas de salud recurrentes o familias con niños pequeños que suelen necesitar atención médica con frecuencia. Por el lado contrario, la desventaja es que la prima mensual suele ser más elevada que en los seguros con copago.
¿Cuál es el seguro de salud privado más adecuado?
Teniendo en cuenta que existen estas dos posibilidades, la elección entre un seguro de salud con o sin copago depende de factores personales, tal y como ya hemos adelantado. Uno de los aspectos a considerar es la frecuencia con la que se suele necesitar atención médica.
Si se goza de buena salud y se acude al médico esporádicamente, un seguro con copago podría ser más rentable. Por el contrario, si se necesita atención médica regular, un seguro sin copago podría resultar más beneficioso a largo plazo.
El presupuesto es otro factor crucial. Aunque los seguros con copago tienen primas mensuales más bajas, es importante calcular el gasto total anual estimado, incluyendo los posibles copagos. En algunos casos, la suma de la prima y los copagos de un seguro con copago puede superar el coste anual de un seguro sin copago.
A la hora de encontrar el mejor presupuesto, un comparador como el de https://seguros-salud.arpem.com/ agiliza mucho el trabajo a la hora de llevar a cabo un análisis rápido entre diferentes compañías, visualizando en un único espacio diferentes tarifas, honorarios, coberturas, precios y condiciones de cada seguro.
En el caso del comparador de Arpem, este recopila información de diferentes aseguradoras y la presenta de forma clara y organizada, permitiendo que el usuario evalúe múltiples opciones a la vez, ahorrando tiempo y esfuerzo en la búsqueda del seguro más adecuado.
Gracias a esta tecnología, los interesados en encontrar un seguro cuentan con una herramienta con la que conseguir la mejor información sobre las condiciones, coberturas y exclusiones de cada aseguradora. ¿Quieres saber si tu seguro de salud privado va a tener acceso a especialistas, pruebas diagnósticas, hospitalización, intervenciones quirúrgicas, cobertura en el extranjero, psicología y fisioterapia o servicios de bienestar? Pues la forma más fácil de conocerlo es con un comparador de seguros online que, además, te informará si tiene o no copago.
